Es el amor...

Un amor que quiere, frente a todo, siempre quiere.
Aquel blog en el que no volviste a escribir.
Siete meses de encontrarnos.
Noches apretaditas en el mismo colchón.
Sorpresas de pequeñas a grandes.
Horas pensando en como decirte.
Y angustia.

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Un libro y ansiedad.
Una casita llena de agujeros.
Dolor en las piernas y los pies.
Noches de acostarme tarde.
Dudas existenciales.
Semanas esperando noticias que no llegan.
Y Paz.

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Te amo imperfectamente, te amo desde mi madurez y la razón.
No puedo amarte alocadamente como no sirve amar.
Te elijo cada mañana cuando te veo con cara de dormido y en esos pantalones que se te caen.

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Amo mi presente, mis miedos y lo que me da vida.
Cada mañana tengo esperanza de comportarme como realmente mi cuerpo se merece.
Me miro al espejo y sé que siempre es un buen día para empezar a cambiar.